INFORMACIÓN PARA PACIENTES
(adaptado de European Association of Urology – Patient Information)
¿QUE ES EL CÁNCER TESTICULAR?
El cáncer/tumor testicular es una variedad de cáncer que se origina en las células del testículo. Los testículos son parte del aparato reproductor masculino y se encargan de producir hormonas masculinas como la testosterona y el esperma. Afecta sobre todo a hombres jóvenes (entre 15-34 años).
Existen varios tipos de tumores testiculares de los cuales los más frecuentes son:
- Seminoma: Esta variedad es la más frecuente (30-40% de los casos) y afecta a hombres de cualquier edad. Únicamente en el 10% de los casos aparecen metástasis en el diagnóstico (es decir, es menos agresivo y con una lenta progresión).
- No seminoma: Afectan a hombres más jóvenes y suelen ser más agresivos (se trata de un tumor muy invasivo localmente y con un 30% de los pacientes con metástasis al diagnóstico). Incluye el carcinoma embrionario (15-25%), coriocarcinoma (1%), tumor del saco vitelino (1%) y teratoma (5-10%).
La evolución natural, tratamiento y seguimiento es radicalmente distinto en función del subtipo de tumor.
FACTORES DE RIESGO PARA CÁNCER TESTICULAR.
– Edad 18 a 35 años.
– Raza blanca.
– Administración de estrógenos durante el embarazo.
– Presencia de tumor testicular contralateral.
– Un testículo no descendido (criptorquidia).
– Hipospadias (apertura para la orina en la parte inferior del pene en lugar de en la punta).
– Pobre producción de esperma que dificulta el embarazo.
– Antecedentes familiares (padre o hermano tuvo cáncer testicular).
SÍNTOMAS DEL CÁNCER TESTICULAR.
El cáncer testicular es un crecimiento anormal no doloroso por lo que podría notar únicamente un aumento de tamaño en uno de los testículos a modo de un bulto o masa (sin embargo, debe saber que la mayoría de los bultos no son cáncer).
Es posible que tenga dolor en un testículo o en el escroto, pero el cáncer testicular generalmente no es doloroso.
Si el cáncer testicular se ha diseminado a otra parte del cuerpo (metástasis), es posible que tenga dolores sordos o sienta bultos en otras áreas.
CÓMO SE DIAGNÓSTICA EL CÁNCER TESTICULAR.
El médico realizará en primer lugar una historia clínica sobre sus antecedentes médicos personales y posteriormente practicará una exploración de la zona testicular.
En función de los hallazgos y de sus antecedentes se solicitarán otras pruebas para el estudio como:
- Ecografía escroto-testicular: para valorar si existen masas en los testículos sugestivas de cáncer/tumor o micro-calcificaciones en los mismos.
En función de los hallazgos se complementará el estudio con:
- Analítica sanguínea: para detectar ciertos marcadores que podrían elevarse en el cáncer testicular (LDH, alfa-fetoproteína y Beta-HCG). Se deben determinar estos marcadores previamente al tratamiento del tumor (pre-orquiectomía) y al menos una semana después de la orquiectomía debido a su vida media. La no normalización de los valores de los marcadores tumorales tras la orquiectomía podría indicar la presencia de metástasis a distancia o, más infrecuente, la presencia de tumor testicular contralateral.
- TAC tóraco-abdomino-pélvico: para valorar si hay extensión de la enfermedad a otros niveles del cuerpo.
- Otras pruebas: La resonancia magnética puede ser útil cuando la TAC sea no concluyente. La gammagrafía ósea y la TAC cerebral se realizan en casos que presenten síntomas.
Es importante llevar a cabo una Autoexploración testicular entre los varones jóvenes (entre 16 y 35 años) periódicamente (cada tres meses, por ejemplo) palpando sus propios testículos en búsqueda de cambios de volumen o consistencia. Ante cualquier cambio significativo es necesario consultar de forma preferente al urólogo.
PRONÓSTICO.
Su pronóstico es el riesgo de que el cáncer crezca y / o regrese después del tratamiento.
La evolución natural o pronóstico de este tipo de tumor depende del estadiaje del mismo basado en el tamaño del tumor, tipo de tumor (seminoma vs no seminoma), de si las células se han diseminado a otros tejidos u órganos (TNM) y los niveles de marcadores tumorales en los análisis de sangre.
- Estadío I: Tumor localizado en el testículo o tumor en el que persisten los marcadores tumorales elevados tras orquiectomía sin evidencia de metástasis.
- Estadío II: tumores con afectación ganglionar.
- Estadío III: tumores con afectación ganglionar y marcadores elevados.
En base al estadiaje se determinarán una serie de grupos pronósticos para planificar el tratamiento y seguimiento posterior (el 90% de los seminomas son de buen pronóstico y el 10% restante de pronóstico intermedio).
CÓMO SE TRATA EL CÁNCER TESTICULAR.
El cáncer de testículo generalmente se trata con cirugía. Es necesaria la extirpación del testículo enfermo (orquiectomía). La orquiectomía es siempre el primer paso en el tratamiento del cáncer de testículo. Para evitar alteraciones en el drenaje linfático que provoquen metástasis en lugares no habituales, la orquiectomía debe realizarse por vía inguinal. Es posible colocar una prótesis de silicona en el lugar del testículo con fines estéticos.
Generalmente hay pocas complicaciones con la extirpación del testículo. Es posible que tenga sangrado o una infección después de la cirugía. A largo plazo, es posible que tenga mala calidad del semen o niveles bajos de testosterona. Esto puede afectar su capacidad para tener descendencia Sin embargo, se le puede ofrecer análisis de semen y crioconservación de espermatozoides (técnica de laboratorio utilizada para conservar el semen durante largo tiempo. Es útil en pacientes con cáncer de testículo que han recibir quimioterapia y pueden quedar infértiles.)
TRATAMIENTOS ADICIONALES.
En algunos casos se puede tener que complementar el tratamiento del cáncer de testículo además de con la orquiectomÍa con otros tratamientos:
- Biopsia del testículo controlateral: la biopsia testicular contralateral ha de ser ofrecida a pacientes con factores de riesgo (volumen testicular menor a 12 ml, criptorquidia, alteraciones de la espermatogénesis o presencia de microcalcificaciones). Las células precancerosas se tratan con radiación o extirpación del testículo.
- Según el estadio del tumor (tamaño y extensión) y el tipo (seminoma o no seminoma) se aplican diferentes tratamiento complementarios mediante quimioterapia fundamentalmente . Si persisten ganglios tumorales tras ello en el abdomen se realiza una operación tipo linfadenectomía retroperitoneal.
Los tumores de testículo son muy sensibles a la quimioterapia por lo que actualmente se curan casi todos los pacientes. El esquema de tratamiento más habitual consiste en una combinación de 3 fármacos: etopósido, bleomicina, epirrubicina.
**Quimioterapia
La quimioterapia trata el cáncer con medicamentos que matan las células cancerosas. Éste tratamiento se administra de manera intravenosa con una frecuencia de una a cuatro veces en intervalos de 3 semanas, dependiendo de la etapa de la enfermedad.
Este tratamiento es muy efectivo pero pueden tener algunos efectos secundarios.
Los efectos secundarios suelen ser leves y desaparecen una vez que finaliza el tratamiento (infección, caída del cabello, cansancio generalizado, malestar intestinal, nauseas y vómitos…)
SEGUIMIENTO
Las visitas de revisión al médico van a depender del tipo de tumor y de la extensión del mismo. Tu urólogo y oncología si procede serán los encargados de marcar el ritmo de las visitas y los tratamientos a recibir.