La Biopsia de próstata por fusión transperineal de imagen mediante Resonancia magnética y Ecografía transrrectal es la herramienta mas avanzada que existe para el diagnóstico precoz, preciso y avanzado del cáncer de próstata.
El cáncer de próstata ya es el tumor maligno más frecuente entre los hombres y el tercer tipo de cáncer que tiene mayor mortalidad, de hecho 1 de cada 3-4 hombres padecerá cáncer de próstata alguna vez en su vida, diagnosticándose en nuestro país más de 27.000 nuevos casos cada año.
Hoy día se utilizan distintos métodos diagnósticos para valorar si un varón puede o no tener un cáncer de próstata. Estos métodos diagnósticos que hoy día se utilizan son el tacto rectal, la prueba de PSA en un análisis de sangre (elevada en el 100% de los tumores de próstata), la Resonancia Magnética de próstata Multiparamétrica (RMNmp), los nuevos test genéticos y por supuesto la biopsia de próstata.
Hay que decir que el tacto rectal es poco sensible y omite la detección de un alto porcentaje de tumores no palpables y por otro lado el valor del PSA puede ser sesgado: resultar normal en tumores muy agresivos y se eleva en patologías de próstata normales como por ejemplo la prostatitis. Hasta el momento actual y tras esta primera exploración, si el urólogo sospechaba la presencia de un tumor, se indicaba la realización de una biopsia “a ciegas” o intuitiva, es decir, sin tener el tumor bien localizado y obteniendo la biopsia sin tener en cuenta las zonas sospechosas. Pero un diagnóstico impreciso conlleva una serie de problemas.
Dado que el tejido extraído durante la biopsia puede no ser de la zona donde se encuentra el tumor, el porcentaje de falsos negativos puede llegar a ser de un 30%. Es decir, se nos escapan 1 de cada 3 cánceres que se biopsiasn con la técnica tradicional y si hay otros parámetros que siguen indicando la presencia de un tumor (como un PSA elevado o en creciente elevación), será necesaria la repetición de la biopsia aumentando el riesgo de infecciones y sangrado.
Volviendo a los métodos diagnósticos de los que disponemos hasta ahora para llegar al diagnóstico final de cáncer, comentaremos que la RMNmp (Resonancia magnética Multiparamétrica de próstata) indica la zona de la próstata que con mayor probabilidad puede albergar dicho tumor basándose en el cálculo de los PI-RADS (del 1 al 5). Con esta prueba podemos valorar tanto la necesidad de una biopsia de próstata como, en el caso de tener que realizarla, el tipo de biopsia y el área en la cual dirigir la toma de muestras y aquí es donde entra la Biopsia por Fusión como herramienta diagnóstica en los últimos tiempos, que ha permitido ajustar el nivel de detección del cáncer de próstata, más allá del 97%.
Consiste en la extracción de muestras de tejido prostático para su posterior análisis en laboratorio de anatomía patológica. Se trata, pues, de la prueba final que determina la naturaleza de la lesión del paciente y establecerá por tanto las bases de su posterior tratamiento.
El dato clave es que las biopsias de próstata guiadas por Fusión de RMN y ecografía permiten diagnosticar además un 30% más de cánceres agresivos, que hubieran pasado desapercibidos por la biopsia clásica. La Resonancia Mágnetica Nuclear (RMNmp) ha revolucionado el diagnóstico del cáncer de próstata ya que ofrece mucha mayor resolución que la ecografía.
Con la biopsia por fusión se permite estudiar de forma completa la próstata mediante la toma de 14 a 20 cilindros de biopsia que son analizadas posteriormente por un patólogo especializado. Así, este sistema de fusión proporciona una mayor precisión en la toma de muestras, un estudio completo de toda la glándula y un máximo de información ya que aporta la configuración 3D de las áreas con tumor dentro de la próstata.
El procedimiento se realiza con una sedación corta y la aguja de punción se introduce por el periné (para una mayor precisión y menor tasa de infección) y los cilindros obtenidos se remiten al patólogo para poder determinar si en las zonas sospechosas biopsiadas existe cáncer y el grado de malignidad. También realizamos un mapeo dirigido de toda la próstata para saber si solo existe un foco de Cáncer de próstata (CaP) o se detectan varias zonas con CaP. La tasa de detección del CaP clínicamente significativo es mayor con la técnica de Biopsia perineal guiada mediante Fusión.
En la actualidad, esta técnica es el procedimiento más eficaz para el diagnóstico del cáncer de próstata, en pacientes que tienen lesiones sospechosas de malignidad, y en pacientes rebiopsiados cuyos análisis de sangre indican un incremento del marcador PSA y a quienes la biopsia prostática transrectal convencional no ha logrado detectar el tumor.
Además, esta prueba evita problemáticas habituales en la biopsia prostática convencional, especialmente disminuye las infecciones, y permite llegar a zonas de próstata de difícil acceso, en especial la parte anterior de la glándula, donde pueden existir tumores de comportamiento agresivo y de peor pronóstico, que a veces se suelen diagnosticar tarde y en estado avanzado.
Para resumir, establecemos en los siguientes puntos las ventajas que ofrece la Biopsia perineal guiada mediante fusión de RMNmp y Ecografía:
- Con la Biopsia perineal guiada mediante Fusión siempre se biopsian las zonas sospechosas y puede accederse a zonas prostáticas poco accesibles con la técnica habitual clásica (zonas anterior y ápex de la glándula).
- Se diagnostican un 30% más de tumores agresivos que con la biopsia clásica transrrectal.
- En muchos hombres con sospecha de CaP se han realizado varias Biopsias con la técnica clásica y el diagnóstico es no cáncer, pero el PSA sigue subiendo y persiste la sospecha de CaP. Es este tipo de pacientes está indicado realizar una Biopsia de próstata por Fusión de RMNmp y ecografía.
- En hombres con CaP de bajo riesgo que desean someterse a un tratamiento denominado “vigilancia activa” (VA) la Biopsia perineal guiada mediante Fusión ofrece una información muy fiable sobre la localización, tamaño y agresividad del cáncer.
- La biopsia transperineal de próstata puede proporcionar un mapa muy fiable del tamaño y ubicación de la enfermedad por lo que se puede plantear al paciente una terapia focal dirigida a la lesión tumoral con la confianza que las zonas de próstata no tratadas no contienen enfermedad clínicamente significativa.
- La principal ventaja de la biopsia prostática de fusión es la gran exactitud en la punción de áreas sospechosas (PI-RADS 3, PI-RADS 4 y PI-RADS 5), con un porcentaje más alto de diagnósticos, si la comparamos con otra técnica. La prueba, que dura una media hora, se realiza en quirófano con el paciente sedado por lo que no sufre ningún tipo de dolor. Después de realizada la biopsia el paciente se puede ir de alta a su domicilio a las 2 horas del procedimiento y solo sentirá una leve molestia en el periné sólo en las primeras horas, que se resuelve con frío local y antiinflamatorios.